Cómo reclamar una factura de luz o gas por cobro excesivo
Recibir una factura de luz o gas con un importe superior al habitual, pero tu consumo no ha cambiado? En la mayoría de los casos, este tipo de cobros abusivos se deben a errores de lectura del contador, facturas estimadas o cargos duplicados.
Saber cómo reclamar una factura de energía correctamente te permitirá recuperar tu dinero y evitar que vuelva a ocurrir. En Tarifa Luz Eléctrica te explicamos cómo reclamar una factura abusiva, cuánto tiempo tienes para hacerlo y qué organismos pueden ayudarte si tu compañía no responde adecuadamente.
Comprobaciones antes de poner una reclamación en la factura de luz o gas
Antes de iniciar una reclamación, conviene asegurarse de que realmente existe un error en la facturación. Estos pasos te ayudarán a evitar trámites innecesarios y agilizar la resolución del problema.
1. Comprueba el funcionamiento de tu contador
El primer paso es verificar que tu contador de luz o gas funciona correctamente.
Un contador defectuoso puede registrar lecturas incorrectas y generar una factura mucho más alta.
Para comprobarlo, accede al contador y compara la lectura que muestra con la que aparece en tu factura.
Si tienes un contador digital, puedes acceder a tus lecturas reales desde la página web de tu distribuidora eléctrica o de gas. Cada distribuidora ofrece un área de cliente donde consultar el consumo registrado. Si no sabes cuál es la tuya, puedes averiguarlo fácilmente consultando nuestro artículo sobre cómo saber cuál es tu distribuidora eléctrica.
💡 Consejo: si quieres evitar lecturas estimadas, envía tú mismo la lectura real de tu contador desde el área de cliente de tu compañía. Así te facturarán exactamente lo que consumes, ni más ni menos.
2. Revisa las condiciones de tu contrato
Verifica que no haya terminado una promoción o descuento que antes reducían tu factura. También es importante comprobar si existe alguna deuda pendiente en el punto de suministro, especialmente si estás de alquiler o acabas de comprar la vivienda. A veces, los sistemas de facturación arrastran importes antiguos del anterior titular.
3. Analiza los cambios en tu consumo
Algunos incrementos pueden tener una explicación lógica:
Electrodomésticos nuevos (como secadoras o aires acondicionados) pueden aumentar el consumo.
Cambios estacionales: la calefacción en invierno o el aire acondicionado en verano disparan el gasto energético.
Aumento de potencia contratada: si has ampliado la potencia, tu término fijo será más caro.
Si tras revisar todos estos factores el consumo sigue sin cuadrar, entonces sí puede tratarse de un error de la comercializadora, y en ese caso debes reclamar la factura.
Motivos para reclamar una factura de luz o gas
Los motivos más habituales para presentar una reclamación ante la compañía son:
Importe excesivo en la factura que no corresponde al consumo real.
Errores en la lectura del contador, especialmente si la factura se basa en estimaciones.
Descuentos o promociones no aplicados, incluidos los del bono social eléctrico.
Cargos por servicios no contratados, como mantenimientos o seguros añadidos.
Averías o cortes de suministro no programados que afecten al consumo o al equipo.
Cobros indebidos por deudas de anteriores inquilinos o propietarios.
Cómo reclamar una factura de luz o gas paso a paso
Una vez que has comprobado que el error no está en tu consumo ni en el contador, sigue estos pasos para reclamar correctamente.
1. Reúne toda la documentación necesaria
Antes de contactar con la compañía, prepara lo siguiente:
- Copia del contrato de suministro.
- La factura errónea y las facturas anteriores para comparar consumos.
- Fotografías del contador o lecturas reales.
- Cualquier comunicación previa con la compañía (correos, formularios, llamadas).
Cuantos más documentos presentes, más fácil será demostrar el error.
2. Contacta con la compañía suministradora
Puedes reclamar por teléfono, correo electrónico o a través del área de cliente online.
Expón de forma clara el motivo de la reclamación e incluye las pruebas que respalden tu caso.
Solicita siempre un número de incidencia o referencia para poder hacer seguimiento.
La comercializadora tiene la obligación de darte una respuesta en un plazo máximo de 30 días. Si no lo hace o la resolución no te convence, podrás elevar la reclamación a otros organismos.
3. Registra y guarda todas las comunicaciones
Es fundamental conservar un registro de todas las interacciones con la empresa:
- Fecha y hora de cada contacto.
- Nombre del agente que te atendió.
- Resumen de la conversación o respuesta obtenida.
Estos datos serán útiles si necesitas acudir a instancias superiores.
4. Presenta la reclamación formal por escrito
Si la respuesta inicial no es satisfactoria, puedes enviar una reclamación por escrito al departamento de atención al cliente de la compañía, detallando el problema y adjuntando toda la documentación.
Por ley, deben responderte en un plazo máximo de un mes. Si no lo hacen o la respuesta no resuelve el problema, llega el momento de acudir a los organismos reguladores.
A quién acudir si la compañía no resuelve la reclamación
Si la compañía no soluciona el problema o no responde, puedes recurrir a distintos organismos que protegen los derechos de los consumidores.
Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC)
La CNMC supervisa las prácticas de las empresas energéticas. Puedes presentar una queja formal si consideras que la compañía ha vulnerado tus derechos o ha incumplido su obligación de facturar correctamente. La CNMC puede abrir un expediente sancionador e incluso obligar a la empresa a devolver importes cobrados de más.
Organismos de consumo autonómicos
Cada comunidad autónoma cuenta con su propio organismo de defensa del consumidor. Allí puedes presentar una hoja de reclamaciones oficial o solicitar mediación. En muchos casos, las juntas arbitrales de consumo resuelven conflictos entre clientes y compañías sin necesidad de acudir a la vía judicial.
Asociaciones de consumidores
Organizaciones como OCU o FACUA pueden ayudarte a gestionar la reclamación, ofrecer asesoramiento jurídico y actuar en tu nombre ante la empresa.
Defensor del Pueblo
Si tras agotar todas las vías sigues sin una respuesta justa, puedes recurrir al Defensor del Pueblo, un organismo independiente que revisa posibles vulneraciones de derechos y puede emitir recomendaciones a las empresas o administraciones.
Plazos para reclamar una factura de luz o gas
Los plazos pueden variar según la comercializadora, pero en general dispones de:
Dos meses desde la emisión de la factura para presentar tu reclamación.
Un mes para recibir respuesta de la compañía.
Tres meses adicionales si decides acudir a la CNMC o a organismos autonómicos.
Aunque los plazos sean amplios, no conviene esperar. Cuanto antes presentes la reclamación, más fácil será obtener una resolución favorable.
Derechos del consumidor al reclamar facturas de luz y gas
Como usuario, la ley te protege frente a errores de facturación y prácticas abusivas. Estos son los principales derechos que debes conocer:
Derecho a una factura clara y precisa
La factura debe reflejar tu consumo real, las tarifas aplicadas y los impuestos de forma transparente.Derecho a reclamar sin penalización
Puedes presentar una reclamación sin que ello implique cortes de suministro, sanciones ni intereses adicionales.Derecho a una respuesta en plazo
Las compañías están obligadas a responder en un máximo de 30 días desde la presentación de la queja.Derecho a recibir reembolso o compensación
Si se confirma el error, deben devolverte el importe cobrado de más o compensarlo en la siguiente factura.Derecho a acudir a organismos de consumo o mediación
Si la empresa no responde o no estás de acuerdo con la resolución, puedes recurrir a organismos públicos sin coste.Derecho a información veraz
La compañía debe informarte sobre tus consumos, precios y condiciones contractuales con total claridad.
Consejos prácticos para evitar errores en futuras facturas
Envía tus lecturas reales periódicamente a la compañía para evitar estimaciones.
Consulta tus consumos desde el área de cliente o app de tu distribuidora.
Guarda todas tus facturas anteriores, así podrás comparar consumos fácilmente.
Revisa las condiciones de tu contrato al menos una vez al año.
Evita contratar servicios adicionales que no necesites o no hayas solicitado.
Reclamar una factura de luz o gas por cobro excesivo es un proceso más sencillo de lo que parece si conoces tus derechos y sigues los pasos adecuados.
Primero, comprueba tu contador, contrato y consumo real. Si todo está correcto y el error procede de la comercializadora, presenta tu reclamación formalmente y guarda toda la documentación.
Preguntas frecuentes sobre reclamaciones de facturas de luz y gas
Para verificar si tu factura de gas natural es correcta, sigue estos pasos:
Revisa la lectura del contador: Compara la lectura del contador indicada en tu factura con la lectura actual de tu contador. Si hay una discrepancia significativa, esto podría indicar un error en la facturación.
Comprueba la tarifa aplicada: Verifica que la tarifa aplicada en tu factura coincide con la que tienes contratada. Esto incluye tanto el precio por kWh como cualquier otro cargo adicional, como el alquiler del contador o los impuestos.
Analiza tu consumo histórico: Revisa tus facturas anteriores para ver si el consumo registrado es consistente con tu uso habitual. Un aumento inesperado podría señalar un problema o un error.
Consulta con la compañía: Si tienes dudas, no dudes en contactar a tu compañía de gas para pedir una explicación detallada de los cargos.
Para reclamar una factura de luz a Endesa, necesitas los siguientes documentos:
- La factura de luz en cuestión.
- Lectura actual del contador.
- Facturas anteriores para identificar inconsistencias.
- Contrato de suministro con Endesa.
- Documentación personal (DNI o NIE).
- Registro de comunicaciones previas con Endesa, si ya has contactado sobre el tema.
Estos documentos te ayudarán a fundamentar tu reclamación.
El tiempo para resolver una reclamación de factura de energía varía, pero generalmente se sitúa entre 15 y 30 días hábiles. Durante este plazo, la compañía revisará la reclamación y te dará una respuesta formal. En casos más complejos, el proceso podría extenderse más allá de los 30 días. Si no recibes respuesta en ese tiempo, puedes escalar la reclamación a organismos reguladores o de protección al consumidor.
Generalmente, el plazo para reclamar una factura de gas es de dos meses desde su emisión. Sin embargo, puedes intentar reclamar después si demuestras que el error se descubrió tarde o fue causado por un fallo técnico. Revisa tu contrato, ya que podría haber normativas específicas que extiendan este plazo. Si Iberdrola rechaza la reclamación, puedes acudir a la CNMC o a organizaciones de consumidores para buscar solución.